Alta de dos dígitos en el consumo de carne debe interrumpir la caída de los últimos años, cuando una parte importante de los brasileños se vio privada del consumo de ese alimento

En 2023, la perspectiva es que el consumo de carne vuelva a aumentar en Brasil. Una estimativa hecha por la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab) afirma que la disponibilidad per capita de la proteína bovina va pasar de 26 a 29 quilos por año por habitante, un alta del 11,6%. 

En 2023, el consumo de carne debe volver a aumentar debido a la mayor oferta de carne bovina en territorio nacional. Según Cesar Castro Alves, consultor Agro de Itaú BBA, el mercado de carne bovina vive un cambio de ciclo, con el aumento de la oferta. 

“Vamos a ver carne más barata, en el mayorista ella ya cayó. En los frigoríficos de bovino, el ciclo tendrá más ofertas, vamos a ver el sacrificio de hembras más allá del promedio,
lo que significa un precio más contenido de buey gordo y de la carne”, dijo el especialista en entrevista a Food Connection. 

Reversión de la caída en el consumo

Con la crisis económica, reducción de la renta y pandemia, el consumo de carne en Brasil cayó mucho los últimos años. En 2018, el consumo promedio era de 34 quilos de carne bovina por año, cayendo a 30 al año siguiente, y paralizando en 27 quilos entre 2020 y 2021. 

Aún en el momento de enfriamiento de la pandemia, registrado a lo largo de 2022, cuando la economía global reabrió de manera definitiva y prácticamente lineal, el consumo de carne en Brasil volvió a presentar una estagnación, aunque programas puntuales de renta hayan aumentado. 

Los datos son del Boletín de Oferta y Demanda de Carnes de Conab (Compañía Nacional de Abastecimiento), que actúa en la generación de informaciones agropecuarias, como seguimiento y evaluación de zafra, para el uso de geotecnologías, para la investigación de precios, para la investigación de costos de producción y estudios técnicos,
además de informaciones sobre comercialización de productos hortigranjeros y análisis de mercado agropecuario. 

La alta sostenida de la renta puede ayudar al brasileño a volver al mercado para tener acceso a carnes de todos los tipos, especialmente las más accesibles. La reanudación de la
política de aumento del sueldo mínimo y la expansión de los programas sociales, con destaque para el Bolsa Familia, tienen potencial para colocar más alimentos de ese tipo en la mesa de los brasileños. 

Una materia de UOL de abril de este año contó la historia de brasileños que empiezan a substituir las proteínas de menor valor agregado por carne bovina después del aumento en el valor del Bolsa Familia, con destaque para las regiones más pobres del país, como en el estado de Alagoas, donde la inseguridad alimenticia es la más grave de Brasil.

Además, la contención de la inflación relacionada a los alimentos es fundamental para la reanudación del consumo. En este caso, además de la política macroeconómica para reducir el precio de la gasolina y de la energía, por ejemplo, que inciden sobre todos los precios, está el aumento de la oferta de carne en el mercado, como dijo Castro Alves, de Itaú BBA.

Reducción del precio

Brasil tiene más ganado que personas. Así, el país cuenta con un rebaño bovino de 224,6 millones de cabezas. Los datos son referentes a 2021 y forman parte de la Encuesta de la Pecuaria Municipal (PPM), divulgada por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). A pesar de la gran cantidad de bovinos, el acortamiento de la renta del brasileño impidió, de manera progresiva los últimos años, que él tuviera acceso al producto producido dentro del territorio nacional. 

Castro Alves destaca que “el spread del buey gordo ha caído”, lo que significa una reducción en el precio para la cría del animal versus el precio de la venta en el mercado.  “Eso
tiene que ver con la desvalorización de la moneda y aumento de la oferta de carne en China”, país que venía demandando cantidades extras de carne brasileña para su inmenso mercado interno, pero que ha conseguido equilibrar oferta y demanda.  

“El consumidor va a sentir un alivio, sí (en el precio de la proteína bovina). El minorista aún está teniendo una gran parte de esa caída, pero la lógica no cambia a corto plazo. Se espera un aumento de ganado en éste y en el próximo año. Es difícil establecer el momento de transferencia de esa reducción, pero, naturalmente, llegará”, concluye Castro Alves. 

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Consumo en la otra punta

Aún con la caída del mercado de carnes en general, el segmento de carnes premium, en la otra punta del consumo, ha experimentado ganancias. Una verificación de 2021 indicó que, de 2011 al año en cuestión, el mercado de carnes nobles había crecido el 20% al año en Brasil, según datos de Beef&Veal Consultoría Aún así, ese tipo de alimento representa apenas el 3% del mercado de carne alrededor del globo. En Brasil, ese porcentual es más que el doble: el 7%, según datos de OCDE, divulgados al comienzo de 2022. Aunque el acceso a ese nicho sea mayor entre personas de la clase AB, la clase C también suele consumir en ocasiones especiales. 

Las carnes nobles son cortes provenientes de animales de alto estándar genético, criados en condiciones específicas para garantizar una mejor calidad. Tenemos como ejemplos la
Angus, una raza bovina británica bien adaptada en Brasil y que pasó por una mejora genética a través de las décadas; y el Wagyu, de origen japonés conocido por su carne marmolizada y de sabor excepcional.

Se estima aún que el tamaño de este mercado sea de más de 200 mil toneladas por año. Eso considerando apenas una pequeña parte del consumo de carne bovina de las clases A y B, aunque se sepa que la clase C también compra los productos premium para ocasiones especiales.

En Brasil, se estima que el 80% del rebaño está formado por razas cebuinas, que, cuando se mejoran genéticamente, tienen capacidad de producir carne de alta calidad, especialmente, cuando se cruzan con razas como Angus.

Una de las productoras de carne premium en Brasil, VPJ ha actuado en encuestas realizadas en la Hacienda Cardinal en Mococa, en el interior de San Pablo, para desarrollar carne de calidad superior y atender esa demanda creciente por cortes refinados. 

“VPJ Pecuária está invirtiendo en un nuevo linaje de animales Aberdeen Angus con alto índice de marmoleo y calidad de carne, obteniendo niveles de grasa entreverada que llegan
muy cerca de la carne de Wagyu, raza con mayor grado de marmoleo del mundo”, dijo la empresa en comunicado en su sitio.